¿Sabes cómo afecta la luz azul para dormir? Aunque pueda parecer un término desconocido para muchos, es algo con lo que convivimos a diario sin darnos cuenta. Está presente en la pantalla del móvil, en el televisor e incluso en algunas bombillas LED. Nos acompaña en nuestras rutinas nocturnas y, sin embargo, no siempre somos conscientes de su impacto.
Desde Ribetes Martí, como fabricantes de artículos para colchones, te contamos todo lo que necesitas saber sobre este tema para que seas consciente de cómo afecta a la calidad de tu sueño.
¡Dormir es la base de una buena salud!
¿Qué es la luz azul?
Seguramente hayas escuchado hablar de la fatiga visual y del impacto que tienen las pantallas en nuestra salud ocular, pero antes de profundizar en sus efectos, es clave entender qué es la luz azul. Este tipo de iluminación forma parte del espectro de luz visible y tiene una longitud de onda corta, lo que significa que transporta una energía mayor en comparación con otros colores.
Se encuentra de forma natural en la luz del sol, pero también en dispositivos electrónicos y bombillas de bajo consumo. Su presencia es tan cotidiana que apenas nos damos cuenta de su influencia, y aunque puede ser beneficiosa en ciertos momentos del día, también puede alterar el descanso si se expone el cuerpo a ella en momentos inadecuados.
Efectos de la luz azul en el sueño
Este tipo de iluminación tiene un impacto directo en nuestro ciclo de descanso, y sus consecuencias pueden ser más notables de lo que imaginamos.
Principales efectos:
- Alteración del ritmo circadiano: nuestro reloj biológico se regula en gran parte por la luz natural. La exposición prolongada a este tipo de iluminación artificial puede confundir al organismo, haciendo que nos cueste más conciliar el sueño.
- Menos descanso reparador: aunque logremos dormir, la calidad del descanso se ve afectada. No es lo mismo dormir muchas horas que dormir bien.
- Fatiga visual y molestias: pasar mucho tiempo frente a pantallas provoca sequedad ocular, irritación y dificultad para enfocar, lo que a su vez puede derivar en dolores de cabeza.
- Aumento del estado de alerta: esta luz estimula la actividad cerebral, lo que puede ser útil durante el día, pero perjudicial por la noche, cuando nuestro cuerpo necesita relajarse.
Aunque pueda parecer inofensiva, la exposición a este tipo de iluminación antes de dormir puede ser la razón por la que te despiertas cansado cada mañana. No se trata de evitarla por completo, sino de saber para qué sirve la luz azul y cómo gestionarla para no alterar tu descanso.
La luz azul disminuye la producción de melatonina
Nuestro organismo regula el sueño gracias a la melatonina, una hormona que se encarga de indicarle al cuerpo cuándo es el momento de descansar. Se segrega principalmente durante la noche y en condiciones de oscuridad, enviando la señal de que es hora de dormir. Sin embargo, cuando el organismo se expone a dispositivos electrónicos o a fuentes de iluminación artificial con alta proporción de tonalidades frías, este proceso se ve alterado.
El vínculo entre luz azul y melatonina es objeto de numerosos estudios, demostrando que el uso prolongado de pantallas antes de dormir puede hacer que nos cueste más conciliar el sueño y, en consecuencia, descansemos peor. La inhibición de esta hormona provoca que el cuerpo retrase la sensación de sueño, lo que puede derivar en insomnio y en un descanso menos profundo.
Si alguna vez te has quedado mirando el móvil en la cama y has tardado más en dormirte, ya tienes una explicación clara. La exposición continua a este tipo de iluminación no solo afecta la conciliación del sueño, sino también su calidad, impidiendo que el cuerpo pase por todas las fases necesarias para un descanso reparador
Consejos para reducir el impacto de la luz azul para dormir
Modificar ciertos hábitos puede marcar una gran diferencia en la calidad del sueño. Aquí tienes algunos consejos sencillos para que consigas un descanso reparador:
- Reduce el tiempo frente a pantallas antes de dormir: evitar el uso del móvil, la tablet o el ordenador al menos una hora antes de acostarse ayuda a que el cuerpo entre en un estado de relajación natural.
- Usa filtros de pantalla: muchos dispositivos incluyen una opción para reducir este tipo de iluminación, lo que disminuye su impacto en los ojos.
- Opta por luz cálida en el dormitorio: las bombillas con tonos amarillos o anaranjados generan una atmósfera más propicia para el descanso.
- Lee en formato físico: en lugar de leer en el móvil o la tablet, optar por un libro en papel permite relajar la vista antes de dormir.
- Mantén una rutina de descanso: irse a la cama siempre a la misma hora ayuda a regular el reloj biológico, facilitando la conciliación del sueño.
La calidad del descanso influye directamente en nuestro bienestar. No se trata solo de dormir muchas horas, sino de conseguir un sueño reparador que permita al cuerpo y la mente recuperar energía. Prestar atención a los efectos de la luz azul puede marcar la diferencia en tu rutina diaria.
En Ribetes Martí te aconsejamos que, además de seguir estos consejos, elijas un colchón de calidad que garantice un descanso óptimo.
Una buena elección en este aspecto puede ayudarte a mejorar la calidad de tu sueño y sentirte mejor cada día.